Según Tohmas Alva Edison "Para la mayoría de los hombres la experiencia es como la luces de popa de un barco, que iluminan solo el camino que queda a la espalda".
"Un experto es un hombre que ha dejado de pensar: sabe", así lo expresó Frank Lloyd Wright, el celebre arquitecto estadounidense que diseño el Solomon R. Gugenheim Museum de New York.
George Bernard Shaw lo ha dicho de otro modo: "Un hombre es sabio no en proporción a su experiencia, sino a su capacidad de experimentar".
Ahora bien, ¿en que medida se respeta la experiencia de un profesional? Y hacemos la pregunta sobre todo hablando de un profesional en tecnología. Porque al estar al día con la formación adecuada es del todo necesario para no perder el tren bala de la tecnología. Como los conocimientos cambian cada vez en forma más rápida, debemos entonces dedicar parte de nuestro tiempo en la investigación y adaptar esos conocimientos a la evolución tecnológica.
¿Pero todo ese esfuerzo es en realidad respetado, y sobre todo la experiencia adquirida? Porque muchas veces vemos como no se aprovecha el caudal de experiencia de un profesional y su conocimiento, y se realizan tareas en vano o repetitivas sin consultar y dejar participar al profesional experimentado.
En el ámbito personal a todos nos gusta que se nos respete y en el ámbito profesional el respeto es imprescindible.
En la época estudiantil nos daba gusto recibir esa experiencia maravillosa de nuestros profesores, y el respeto que nos enseñaban por aquellas personas que ya habían experimentado alguna tarea en especial y en los cuales debíamos reflejarnos y adquirir ese conocimiento.
Tal vez pueda ser el apuro con cual se vive hoy día, o tal vez sea las ansias por mostrar resultados que hacen que ese respeto por la experiencia se deje de lado.
Albert Einstein decía: "La única fuente del conocimiento es la experiencia".
"Un experto es un hombre que ha dejado de pensar: sabe", así lo expresó Frank Lloyd Wright, el celebre arquitecto estadounidense que diseño el Solomon R. Gugenheim Museum de New York.
George Bernard Shaw lo ha dicho de otro modo: "Un hombre es sabio no en proporción a su experiencia, sino a su capacidad de experimentar".
Ahora bien, ¿en que medida se respeta la experiencia de un profesional? Y hacemos la pregunta sobre todo hablando de un profesional en tecnología. Porque al estar al día con la formación adecuada es del todo necesario para no perder el tren bala de la tecnología. Como los conocimientos cambian cada vez en forma más rápida, debemos entonces dedicar parte de nuestro tiempo en la investigación y adaptar esos conocimientos a la evolución tecnológica.
¿Pero todo ese esfuerzo es en realidad respetado, y sobre todo la experiencia adquirida? Porque muchas veces vemos como no se aprovecha el caudal de experiencia de un profesional y su conocimiento, y se realizan tareas en vano o repetitivas sin consultar y dejar participar al profesional experimentado.
En el ámbito personal a todos nos gusta que se nos respete y en el ámbito profesional el respeto es imprescindible.
En la época estudiantil nos daba gusto recibir esa experiencia maravillosa de nuestros profesores, y el respeto que nos enseñaban por aquellas personas que ya habían experimentado alguna tarea en especial y en los cuales debíamos reflejarnos y adquirir ese conocimiento.
Tal vez pueda ser el apuro con cual se vive hoy día, o tal vez sea las ansias por mostrar resultados que hacen que ese respeto por la experiencia se deje de lado.
Albert Einstein decía: "La única fuente del conocimiento es la experiencia".
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