Cada vez que las ciudades van agregando calles, edificaciones, industrias y además el crecimiento de la población, las temperaturas en las ciudades aumenta con respecto a su entorno rural, creándose así las islas de calor.
Debido a la existencia de asfalto, cemento, flujo de automóviles y baja aireación, la temperatura se eleva entre los 10 y 15 grados por sobre la temperatura ambiental. Esto conlleva además del riesgo para la salud de las personas, el aumento del consumo de energía y por ende la liberación de gases de efecto invernadero, polución ambiental, aumento de los niveles de ozono urbano y aumento de los costes de energía y de agua.
En síntesis, una isla de calor es el nombre que se utiliza para describir el calor característico tanto de la atmósfera como de las superficies en las ciudades o áreas urbanas comparadas con sus entornos no urbanizados. La isla de calor es un ejemplo de modificación climática no intencional cuando la urbanización le cambia las características a la superficie y a la atmósfera de la tierra.
Se han definido 3 tipos de islas de calor:
1) ICCD (Islas de calor de la capa de Dosel)
2) ICCP (islas de calor de la capa de perímetro)
3) ICS (islas de calor de superficie)
Las 2 primeras se refieren a un calentamiento de la atmósfera urbana, la tercera se refiere al calor relativo de las superficies urbanas.
La capa de dosel urbana, conocida por la sigla CDU, es la capa de aire de las ciudades que está más cercana a la superficie, la cual se extiende hacia arriba aproximadamente hasta la altura media de las edificaciones. Por encima de la capa de dosel urbana se encuentra la capa de perímetro urbana, la cual puede ser de 1 km o más de espesor durante el día, y encogerse a cientos de metros o menos durante la noche.
La isla de calor de la capa de perímetro o ICCP es la que forma una cúpula de aire más caliente que se extiende en dirección del viento más allá de la ciudad. El viento a menudo le cambia la forma a la cúpula por una forma de pluma.
La cantidad de habitantes es un factor decisivo que condiciona la aparición del UHI (efecto isla de calor urbano), pues en las ciudades con población de 500.000 a 1.000.000 de habitantes, la temperatura del aire aumenta en 1.1 – 1.2 Cº con respecto a las zonas no urbanas de alrededor. En las ciudades con más de un 1.000.000 de habitantes el valor aumenta hasta 1.2 – 1.5Cº.
Con la aparición del UHI se producen cambios en el clima urbano, mayores precipitaciones, periodo de vegetación más largo y se ven más nubes en forma de cúmulo.
Este fenómeno del UHI tiene un real impacto negativo sobre el organismo humano, especialmente en verano, ya que puede causar recalentamiento. Por lo tanto es imprescindible aumentar la proporción de zonas verdes y pequeñas masas de agua.
Por último agregamos, que el efecto de isla de calor es una situación urbana en la que se produce una acumulación de calor intensa por la gran cantidad de hormigón y otros materiales absorbentes de calor en las ciudades. Los edificios altos provocan también que la radiación solar permanezca en el suelo, calentando toda la superficie.
La necesidad de tener árboles que den abundante sombra, apostar por tejados ajardinados, aumentar las zonas con agua en los parques, erradicar la contaminación ambiental producida por los vehículos de transporte, son medidas que pueden ayudar a reducir el efecto de las islas de calor, y sobre todo diseñando y reformando las ciudades con el concepto de CIUDADES VERDES.
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