Basándonos en el artículo anterior en donde proponemos los World Cafés Tecnológicos, proyectamos esta metodología para crear e inventar el Paraguay Tecnológico que tanto se precisa.
Debemos de dejar de ser simples espectadores de lo que pasa tecnológicamente a nivel mundial, para ser actores y participes en la Sociedad de la Información y del Conocimiento que vivimos.
Lógicamente se necesita fundamentalmente el apoyo financiero, pero se debe dar el primer paso si se desea seguir el camino, y creemos firmemente que el primer paso bien puede ser la consolidación de World Cafés en las ciudades, barrios y comunidades, para que en esa participación se vean las inquietudes, se traspase conocimiento y se vean las necesidades.
Debemos de dejar de ser simples espectadores de lo que pasa tecnológicamente a nivel mundial, para ser actores y participes en la Sociedad de la Información y del Conocimiento que vivimos.
Lógicamente se necesita fundamentalmente el apoyo financiero, pero se debe dar el primer paso si se desea seguir el camino, y creemos firmemente que el primer paso bien puede ser la consolidación de World Cafés en las ciudades, barrios y comunidades, para que en esa participación se vean las inquietudes, se traspase conocimiento y se vean las necesidades.
La tecnología es un arma fundamental, y no debemos hacernos a un lado, pero no debe tener discriminación de ningún tipo, ni de credo, ni de razas, ni de colores partidarios.
Llegará un momento en que las autoridades nacionales deberán intervenir para darle un curso más específico, pero a través de una Política Tecnológica de Estado que defina las normas y estándares a ser utilizados.
Países más pobres y más pequeños han asumido la tecnología como una Política de Estado y fueron buenos los resultados, pero está en nosotros el poder comenzar con las tareas, en nosotros los tecnológicos, en los usuarios de tecnología y en aquellos que no importando la edad quieren aprender y avanzar.
La tecnología no elige la edad, todos tienen derecho a ella, y debemos asumir el compromiso de "aprender toda la vida", quién más, quién menos tiene un conocimiento para traspasar, como así también debe tener la mente abierta para recibir conocimiento.
Es hora de unirse, de juntar voluntades y no seguir trabajando en islas separadas, hay muchos profesionales de muy buen nivel y se debe aprovechar esa experiencia y conocimiento para el bien de otros.
Desde este lugar proponemos la formación de World Cafés que con sus tareas vayan diseñando la Revolución Digital que el país necesita, que construya el Paraguay Tecnológico por y para todos.
Nos gustaría recibir sugestiones, ideas e inquietudes para poder comenzar con las tareas que hagan realidad este proyecto.
Llegará un momento en que las autoridades nacionales deberán intervenir para darle un curso más específico, pero a través de una Política Tecnológica de Estado que defina las normas y estándares a ser utilizados.
Países más pobres y más pequeños han asumido la tecnología como una Política de Estado y fueron buenos los resultados, pero está en nosotros el poder comenzar con las tareas, en nosotros los tecnológicos, en los usuarios de tecnología y en aquellos que no importando la edad quieren aprender y avanzar.
La tecnología no elige la edad, todos tienen derecho a ella, y debemos asumir el compromiso de "aprender toda la vida", quién más, quién menos tiene un conocimiento para traspasar, como así también debe tener la mente abierta para recibir conocimiento.
Es hora de unirse, de juntar voluntades y no seguir trabajando en islas separadas, hay muchos profesionales de muy buen nivel y se debe aprovechar esa experiencia y conocimiento para el bien de otros.
Desde este lugar proponemos la formación de World Cafés que con sus tareas vayan diseñando la Revolución Digital que el país necesita, que construya el Paraguay Tecnológico por y para todos.
Nos gustaría recibir sugestiones, ideas e inquietudes para poder comenzar con las tareas que hagan realidad este proyecto.
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