La fantasía de los pescadores

"Yo soy de un barrio playero
mezcla de sol y de sal
entre cuentos de pescadores
fantasías sobre el mar."

Me crié en el barrio de Nuevo Malvín sobre la costa montevideana, y recuerdo en aquellos ya desaparecidos ranchos de pescadores entre las playas de Buceo y de Malvín, las anécdotas de los propios pescadores sobre sus andanzas en el mar. Aquellas comilonas bien regadas de vino tinto y de las historias más variadas, sobre todo del tamaño de los peces atrapados, a pesar que nunca tuve la oportunidad de ver que pescaran algún pez más grande que una sabrosa corvina.

El tiempo fue pasando, y me fue mostrando que en otras profesiones también existían fantasías de pescadores, y pescadores con grandes anzuelos y redes que se dedicaban a la pesca de conocimiento e ideas.

Estos pescadores que encontré en el camino de la vida, nos hablaban de grandes logros que nunca vimos, pero todo se resumía a simples historias sin mucho contenido, y a pesar que no existía el escenario del mar cercano o de las comilonas abundantes con vino y candombe, me hacían recordar a aquellos viejos pescadores del Río de la Plata, tan solo fantasías que con los días se esfumaban sin dejar huella.

En el ambiente tecnológico también existen muchos pescadores lamentablemente y con muchas fantasías, y muchas veces con sus redes pescan a alguien que le hacen creer sus fantasías. Pero bueno así es el mundo y tenemos que convivir con esas cosas.

Pero haciendo un balance me quedo con aquellos pescadores, gente de trabajo, de lucha, que a pesar de sus fantasías sobre el mar tenían un gran corazón y un gran sentido de la amistad y del compartir, no hubieran podido convivir nunca con los pescadores que hoy en día se ocultan en ropas de ciudadanos modernos.