En estos tiempos en que además de tener como opciones la implementación de software libre, o software propietario o simplemente un híbrido; y también la preocupación por la reducción de emisión de carbono y la eficiencia energética, se debe tener muy en cuenta entonces la Administración Tecnológica de una organización.
Esta Administración Tecnológica debe ser flexible y adaptarse a las circunstancias imperantes, y los objetivos de esta van produciendo una reacción en cadena dentro de cada proyecto.
Cuando se supervisa la tecnología existen infinidades de soluciones para los problemas o circunstancias que se presentan, pero todo esto debe ser gerenciado por ideas concretas, prácticas y renovadoras, para no caer en un desaprovechamiento de las herramientas que se poseen.
Se debe entonces crear ideas, estando en una renovación y actualización constante, estas ideas se deben sustentar con criterios firmes y conocimiento amplio y cabal de lo que se propone.
Un siguiente paso es el desarrollo de las ideas, dentro de este paso se trazan los objetivos generales y particulares; por último la concreción de las ideas, es donde pueden actuar también los objetivos alternativos, para ir alcanzando la meta de los objetivos propuestos.
Al hacer uso de las ideas, al liberarlas, se produce una reacción en cadena que nos lleva a límites nunca antes imaginados.
La tecnología en si es una constante evolución, no solamente si nos referimos a lo que en equipos se trata, también en las aplicaciones, pues se tienen diversos lenguajes de programación, diferentes arquitecturas, variadas soluciones para el usuario, todo esto debe conjugarse para lograr dar una buena respuesta a una necesidad puntual. Es aquí donde deben amalgamarse las ideas y los objetivos, requiriendo una perfecta planificación para no desaprovechar esfuerzos y no desperdiciar el tiempo que sin duda es invalorable.
Si desempeñamos una buena administración tecnológica no estaremos realizando esfuerzos en vano ni tampoco malgastando el tiempo.
La reacción en cadena de los objetivos hay que saberla conducir, hay que guiarla, no permitir que nos sobre pase, sí logramos dominarla estaremos realizando una muy buena administración tecnológica.
Resumiendo, las ideas son generadoras de los objetivos, se deben administrar, deben ser ideas basadas en la realidad y en la necesidad, para producir entonces esa reacción en cadena de forma positiva.
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